Los días 14 y 15 de noviembre afiliados del Sindicato Satse de Cataluña se forman junto a Emergency Staff en prevención y control de agresiones. El enfoque sanitario de nuestra formación “Control de Paciente Agitado y/o Agresivo” que busca anticiparse a la agresión siempre ha sido clara y así lo han percibido los alumnos de estas sesiones formativas.

El sindicato Satse nos presentó resultados de la macroencuesta en el conjunto del Estado sobre las agresiones a las enfermeras y enfermeros donde se refleja que siete de cada diez enfermas y enfermeros han sido agredidos durante la pandemia del Covid-19.  Se notifica que cerca de ocho de cada 10 enfermeras y enfermeros considera que ha empeorado el ambiente laboral y la relación con los pacientes en los hospitales, centros de salud y otros centros sanitarios y sociosanitarios a lo largo de los dos últimos años de pandemia. Un 98 por ciento de las enfermeras y enfermeros consultados por el Sindicato de Enfermería reclama una Ley estatal que luche contra las agresiones físicas y verbales a los profesionales sanitarios de manera conjunta, coordinada y eficaz en el conjunto del Estado.

En Madrid, 9 de marzo de 2022 presentaron que siete de cada diez enfermeras y enfermeros de nuestro país ha sufrido una agresión física o verbal por parte de pacientes o familiares en los dos últimos años en los que nuestro sistema sanitario ha tenido que hacer frente a la pandemia del Covid-19, mientras que cerca de ocho de cada diez profesionales considera que en este tiempo ha empeorado el ambiente laboral y la relación con los pacientes.

Así se desprende del avance de resultados de la macroencuesta que SATSE ha realizado al conjunto de enfermeras y enfermeros de las diferentes comunidades autónomas para conocer la realidad actual sobre la violencia física (empujones, golpes, puñetazos…) y/o verbal (amenazas, insultos, vejaciones…) que sufren estos profesionales sanitarios a la hora de desarrollar su labor asistencial y de cuidados en los hospitales, centros de salud y otros centros sanitarios y sociosanitarios.

Según SATSE, los primeros resultados son concluyentes al refrendar que las agresiones, tanto físicas como verbales, afectan a una gran mayoría de estos profesionales sanitarios y que, a pesar del reconocimiento social manifestado al inicio de la pandemia del Covid-19, siguen siendo un grave problema que hay que abordar y resolver con urgencia.

El Sindicato de Enfermería subraya que el entendible hartazgo y frustración de la población al constatar el déficit estructural de recursos y medios que tiene la sanidad, y que la pandemia ha empeorado, está propiciando que algunos pacientes y familiares lo estén pagando con unos profesionales que, además de no ser los responsables de la situación, están haciendo todo lo posible para que no repercuta en la atención y cuidados pese a llevar ya dos años de lucha contra la pandemia.

En concreto, siete de cada diez enfermeras y enfermeros denuncian haber sufrido una agresión física o verbal por parte de pacientes o familiares en los dos últimos años, “una cifra muy preocupante que, sin duda, sitúa a las agresiones como uno de los principales riegos para su salud física, psicológica y emocional a la hora de desarrollar su labor asistencial y de cuidados”, recalca. De igual manera, el 77 por ciento se muestra convencido de que el ambiente laboral y la relación con los pacientes ha empeorado en los últimos tiempos caracterizados por la fuerte sobrecarga y presión asistencial, así como el claro déficit de plantillas enfermeras, en el conjunto de nuestro sistema sanitario. Ante esta lamentable realidad, la práctica totalidad de enfermeras y enfermeros consultados por SATSE en todo el Estado, un 98 por ciento, se muestran partidarios de aprobar una Ley estatal con la finalidad de crear un marco común de actuación a la hora de evitar las agresiones y actuar de la manera más eficaz y efectiva una vez que se han producido. Una reivindicación que comparte el Sindicato de Enfermería que ya trasladó antes de la pandemia al conjunto de administraciones públicas y a los partidos políticos una propuesta concreta de Ley estatal que contempla más de 50 medidas y acciones en todos los ámbitos y niveles para luchar contra esta lacra que afecta especialmente a las enfermeras y enfermeros.

Al respecto, la organización sindical de Cataluña ha empezado a implementar medidas contra la prevención como la formación de Control del Paciente Agitado/Agresivo con el fin de aprender a detectar precozmente una situación hostil que pueda desencadenar en una agresión tanto física como verbal.