Cada vez un mayor número de empresas en nuestro país se animan a incluir entre sus elementos de seguridad un Desfibrilador semiautomático DESA. Parece que la tradicional visión de “no es obligatorio en esta comunidad, cuando la norma obligue nos pondremos a ello” es un pensamiento minoritario frente a quienes comprenden las ventajas de contar con este equipo en sus instalaciones más allá  de las particularidades de España y sus transferencias en materia de Sanidad. Si en la comunidad de Madrid o en Aragón por ejemplo, los hoteles y/o empresas con un determinado número de plazas, los colegios, los centros deportivos etc. deben contar un Desfibrilador y empleados que sepan utilizarlo, es lógico que sus homónimos en Baleares se planteen proteger a sus clientes y trabajadores en el mismo sentido más allá de que la normativa haya o no haya entrado aún en vigor.

La parada cardiorespiratoria es una de las principales causas de muerte fuera del entorno hospitalario y contar un Desfibrilador y personal formado puede marcar la diferencia entre tener un susto o sufrir una desgracia. Uno de los desfibriladores que más instalamos en Emergency Staff es el modelo HeartSine Samaritan 350P y una de las cuestiones que más nos plantean al inicio nuestros clientes, alumnado o incluso la prensa,  es el miedo a dar una descarga a una persona que no la necesite. En este sentido es muy importante destacar que esta opción no es posible. El modelo HeartSine Samaritan 350P es un desfibrilador semiautomático que solo realizará la descarga si el propio dispositivo detecta que es necesario no hay opción a que la persona decida si debe o no pulsar el botón de descarga.

El desfibrilador analiza el ritmo cardiaco y proporciona la descarga para tratar de corregir el ritmo del corazón. La descarga nunca podrá ser aplicada si no es necesaria. La rápida respuesta en caso de paro cardíaco es crucial para la supervivencia de la víctima y/o para evitar secuelas graves y por eso hay que estar preparados para actuar desde el primer momento hasta que lleguen los servicios de emergencia. Por esta razón es tan importante contar con un desfibrilador en tus instalaciones. Siendo pragmáticos, su coste es similar al de incluir un nuevo equipo informático, el dispositivo tiene 10 años de garantía y el alivio que se siente al presenciar una parada cardiaca y contar con un elemento necesario para actuar es difícil de cuantificar.

La mejor herramienta contra el miedo siempre es la información  y la  formación. Si estás interesada/o en incluir un desfibrilador en tus instalaciones puedes ponerte en contacto con nosotros y nuestro equipo resolverá cualquier duda que puedas tener.